Es conocido que la alimentación tiene un impacto sustancial en el bienestar y la salud de las personas. Si bien, existen numerosos estudios científicos que han advertido sobre los riesgos de consumir comidas ultraprocesadas, un reciente experimento quiso ir un paso más allá.
Un grupo de científicos del King’s College de Londres reunió a unas hermanas gemelas de 24 años y les pidieron que mantuvieran dietas radicalmente opuestas por un periodo de dos semanas. Los resultados desconcertaron a los investigadores.
